POR: OSCAR JAVIER JARQUÍN VILLA
Como todos sabemos, el municipio es una forma de organización política del gobierno, libre, autónomo y de fuerte influencia en la división política de los estados. El municipio es considerado la unidad principal de la organización social, económica y política del país, y la piedra angular del desarrollo regional.
Por ello, el municipio libre fue el modelo elegido para organizar y facilitar un funcionamiento más ordenado a las funciones del sistema del gobierno federal altamente centralizado, entendiendo la exigencia de ser congruentes con la formulación de políticas públicas y la coordinación a través de las relaciones intergubernamentales entre la federación, los estados y ayuntamientos. Sin embargo, la autonomía de los gobiernos locales en el terreno financiero constituye la base para sustentar una real autonomía en el ámbito político y en el de la gestión administrativa. Las tareas de la administración de la hacienda pública municipal se conforma con las decisiones de gestión sobre sus propios bienes, más el uso de las contribuciones y participaciones que le canaliza el gobierno federal.
El municipio libre como tercer nivel de gobierno, debe crear condiciones para una democracia más participativa. Debe tenerse presente que si se organiza apropiadamente el nivel del gobierno local, permitirá un funcionamiento más eficiente de la actividad social, cultural, productiva y de sostenibilidad del ambiente, por lo que es muy importante que el municipio cuente con personal capacitado y eficiente que ayude no solo en la administración del municipio a fin de que sea más productivo, sino que tenga una verdadera vocación de servicio y así logre un vínculo más cercano con la ciudadanía.
En la medida que el municipio cuente con trabajadores capacitados, motivados y comprometidos con el municipio y la ciudadanía, va a obtener más eficiencia en su administración y logrará la participación más activa de la población.
Ahora bien, ¿cómo logramos que los trabajadores del municipio se encuentren más capacitados, motivados y comprometidos con su función pública, cuando los trabajadores carecen de un buen sueldo, cuentan con bajas o nulas prestaciones, no cuentan con las herramientas necesarias para capacitarse y se encuentran hoy en día bajo mucho estrés laboral y financiero? La respuesta la encontramos en los planes flexibles de beneficios que se pueden implementar en cualquier organización pública y privada.
¿Pero, qué es un Plan flexible de beneficios?
Un plan flexible de beneficios es la nueva tendencia en el pago de compensaciones y diversas prestaciones para los trabajadores de empresas nacionales e internacionales, diseñado como un programa pensado para mejorar el bienestar empresarial, que incide en diferentes áreas de los trabajadores con el objetivo de mejorar sus prestaciones, sus capacidades, su salud física y estado anímico.
La implementación del plan flexible de beneficios toma mucha relevancia en estos momentos donde el trabajador se encuentra en un complicado estado emocional derivado del covid-19, que le ha generado incertidumbre laboral, cambio de sus condiciones laborales y en muchos casos una disminución de su ingreso.
¿Qué beneficios genera un plan flexible de beneficios?
Un plan flexible de beneficios puede aumentar el ingreso del trabajador, generar diversas prestaciones como ahorro complementario para el retiro del trabajador, compensaciones para mejorar su calidad de vida, para prevenir el estrés laboral y financiero, coberturas contra el estrés laboral, cursos de capacitación o adiestramiento en diferentes áreas, y beneficios adicionales como seguros de vida, préstamos personales, anticipos de nómina, asistencia funeraria, asistencia psicológica, médica, legal, tecnológica, descuentos en tiendas departamentales, entre otros, sin que le cuesten al trabajador o sindicato, ni al patrón.
BENEFICIOS PARA EL TRABAJADOR
Al implementar un plan flexible se obtienen beneficios en los siguientes ámbitos del trabajador:
PROFESIONAL
• Mayor productividad. Un empleado feliz puede llegar a ser hasta un 30% más productivo.
• Estabilidad en plantilla. Un trabajador feliz y motivado no busca cambiar de empresa.
• Ambiente de trabajo. Se reducen los conflictos y se mejoran las relaciones laborales. Influye positivamente en el trabajo en equipo y en la cooperación entre compañeros.
• Podrá tener acceso a cursos de capacitación y/o adiestramiento
PERSONAL
• Prevenir y curar enfermedades como la ansiedad o el estrés.
• Incremento de la resistencia física y mental.
• Mejora de las capacidades mentales: a la hora de procesar información, mayor capacidad de percepción y comprensión, para aprender nuevas disciplinas.
ECONÓMICO
• Contará con un ahorro complementario para el retiro, que le permitirá tener un mayor fondo para su retiro.
BENEFICIOS PARA EL MUNICIPIO
• Fácil implementación para el municipio.
• Cumple con las disposiciones laborales.
• Para implementarlo no se incrementa requiere de partida presupuestal adicional.
• Ayuda a cumplir con la NOM 035.
• Herramienta para regularizar la nómina.
• Genera plan de lealtad para retención de talento.
• Aumenta la productividad laboral.
• Respeta los derechos laborales del trabajador
En conclusión, un plan integral de beneficios es una alternativa que deben implementar los patrones del sector público y privado para el beneficio de sus trabajadores, y en el caso de los municipios, les generará grandes resultados en su administración y contribuirán a ser un municipio con gran responsabilidad social.
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